El agua es el recurso básico para garantizar la vida de todos los seres vivos del planeta. El acceso a agua, saneamiento e higiene es un derecho fundamental, y sin embargo, miles de millones de personas de todo el mundo siguen enfrentándose a diario a enormes dificultades para acceder a los servicios más básicos.
PROBLEMAS PARA ACCEDER A RECURSOS HÍDRICOS
Aunque 2.100 millones de personas han conseguido acceso a mejores condiciones de agua y saneamiento desde 1990, la decreciente disponibilidad de agua potable de calidad es un problema importante que aqueja a todos los continentes. Se estima que al menos 1 de cada 4 personas se verá afectada por escasez de agua para 2050.
TRATAMIENTO DE AGUA PARA GARANTIZAR EL ACCESO A AGUA LIMPIA Y EVITAR LA CONTAMINACIÓN DE RÍOS Y MARES
A través del tratamiento de agua, un proceso con operaciones de distintos tipos (físico, químico, físico-químico o biológico) cuyo objetivo es la eliminación y/o reducción de la contaminación o de las características no deseables de las aguas.
La finalidad de este proceso es obtener agua con las características adecuadas al uso que se le quiera dar. Por eso, el proceso de tratamiento de agua varía en función de las propiedades de partida del agua y también de su uso final.
El tratamiento de agua es cada vez más necesario debido a la escasez de agua potable y a la creciente necesidad de la población mundial. Del total de agua que hay en el planeta, tan solo un 2,5 % es agua dulce, y de esa cantidad tan solo el 0,4 % es agua apta para el consumo humano.
ACCIONA trabaja para garantizar el acceso al agua a las personas, desde la captación del agua, su potabilización o desalación, hasta su depuración y retorno al medio ambiente.
acciona.org trabaja por llevar cambios sencillos a comunidades de todo el mundo para conseguir una vida mejor. Desde acciona.org facilitamos el acceso a agua potable y saneamiento apropiado, de manera asequible y sostenible para comunidades en desarrollo.
Las islas son unas de las zonas más afectadas por el cambio climático y el estrés hídrico, pero las tecnologías de desalación permitirán paliar el déficit de agua potable, tal como demuestran las Islas Canarias.